martes, 13 de agosto de 2013

La corriente de chorro polar, el clima y el calentamiento global


Ya hemos hablado de las corrientes en chorro. Estas corrientes son unos canales de vientos fuertes, entre 90 y 400 km/h, que circulan de oeste a este, a una altura entre 9 y 14 km, y que separan las grandes masas de aire del planeta. Hay dos en cada hemisferio: la corriente en chorro tropical, que circula entre la masa de aire tropical y la templada, y la corriente en chorro polar, que circula entra la masa de aire templada y la polar.


 De las dos corrientes en chorro del hemisferio norte, la que tiene más influencia en España es, sin duda, la polar. Aunque circula de oeste a este, a manudo presenta ondulaciones orientadas hacia el norte y hacia el sur, provocadas por el hecho de circular por orografías distintas, al pasar de océanos a continentes y viceversa. Estas ondulaciones, que también se van desplazando hacia el este, dirigen el movimiento de los anticiclones, la formación de las borrascas y el desplazamiento de las masas de aire.

Por regla general, la corriente en chorro es más fuerte cuanto mayor sea el contraste de temperaturas entre la masa de aire polar y la masa de aire templado. A su vez, cuanto más fuerte sea la corriente, tiene menos tendencia a ondularse (y las ondulaciones se mueven más aprisa) y, viceversa, cuanto más débil sea, más se ondula, y estas ondulaciones tienen tendencia a desplazarse más despacio.


Cuando la corriente en chorro polar se debilita, tiende a llevar aire polar más hacia el sur y aire templado más hacia el norte, lo que provoca períodos de frío en el sur y de elevación de temperatura en el norte. Como las ondulaciones se desplazan más lentamente, estos períodos “anómalos” se prolongan más de lo habitual. Al llevar aire templado hacia el norte, tienden a retroalimentar positivamente el aumento de temperatura de las zonas circumpolares.


Desde hace tres años se vienen observando ondulaciones excesivas en la corriente de chorro polar del hemisferio norte, lo que indica que esta corriente se ha debilitado. Una de las causas podría ser que las regiones polares del hemisferio norte se han calentado más que el resto del planeta, por lo que la diferencia de temperatura entre la masa de aire polar y la masa de aire templada se han reducido. Por tanto, es posible que este tiempo más o menos loco que estamos experimentando sea debido al calentamiento global. Sin embargo, aún es pronto para poder afirmarlo.


A Rough Guide tothe Jet Stream: what it is, how it works and how it is responding to enhancedArctic warming



2 comentarios: