Según los datos de la
Universidad de Bremen, la extensión del hielo marino ártico ha alcanzado su
máximo el pasado 12 de marzo, con un valor de 14,695 millones de km2.
Por lo que respecta al hielo
marino de la Antártida, el mínimo se alcanzó el pasado 23 de febrero, con un
valor de 2,547 millones de km2.
Esta extensión del hielo
marino se define como el área de la superficie marina con, al menos, un 15 % de
concentración de hielo.
En el Ártico, la extensión
máxima anual de este invierno se ha situado en la línea de los últimos años. La
tendencia, desde el año 1972, es de una pérdida anual de 35.200 km2 de hielo
marino.
En el Antártico, la extensión
mínima anual sigue sin tener una tendencia significativa.
Tanto en el Ártico como en el
Antártico, los valores actuales son inferiores a los del promedio de los años
2010 a 2018.